¿Te dan miedo los datos? Los datos son simplemente números que nos hablan de una realidad. Estos pueden ser una estadística poblacional, un estado de cuenta, un sueldo, el número de veces que haces ejercicio a la semana o la cantidad que vendiste el mes pasado. Los datos existen, los quieras ver o no, y la realidad es que pocas veces los queremos ver porque el significado que les damos va directamente relacionado con nuestro desempeño, con qué tan bueno o malo eres en algo y si los datos no hablan a tu favor, es probable que te sientas fatal.
Aunado a esto, la forma en la que nos educaron y nos relacionamos desde pequeños con los datos suele ser negativa. Las clases de matemáticas y las calificaciones fueron la pesadilla de muchos.
Pero, ¿qué tal si les damos la vuelta y empezamos a verlos como nuestros aliados en lugar de como nuestros enemigos? Si cambiamos nuestra percepción acerca de los datos podremos utilizarlos como herramientas para cambiar eso que nos están arrojando y que nos incomoda. Por ejemplo, una mala evaluación en el trabajo puede hacernos sentir mal sobre nosotros, pero qué tal si utilizamos esta evaluación simplemente como información de qué es lo que podemos mejorar y una oportunidad para analizar qué podemos hacer diferente.
Aquí hay 4 razones por las cuales los datos, a pesar de la incomodidad inicial, pueden ser una herramienta valiosa:
- Autoconocimiento: Los datos nos ofrecen una versión objetiva de nosotros mismos, y esto no quiere decir si somos buenos o malos para algo. Los datos pueden revelar patrones en nuestro comportamiento que nos están limitando, pueden revelar preferencias de las que no éramos conscientes y también darnos información sobre nuestro estado de salud. Al enfrentar esta información podremos hacernos conscientes de qué podemos hacer diferente para mejorar nuestra calidad de vida.
- Mejor toma de decisiones: Los datos pueden ayudarnos a tomar decisiones más acertadas. Si te cuesta trabajo tomar decisiones, observa los datos que tienes sobre la situación o sobre situaciones similares anteriores para ver qué es más conveniente. Llevar un registro de las decisiones y sus resultados, te ayudará a consultar en un futuro e ir mejorando los resultados.
- Personalización: Así como nuestros datos a la hora de elegir qué película vas a ver en Netflix o a qué reaccionas en redes sociales puede ayudar al algoritmo a recomendarte cada vez con más exactitud lo que te va a gustar, tú puedes utilizar los datos de tus clientes o consumidores para mejorar tu servicio o experiencia e incrementar tus números.
- Innovación y progreso: Los datos impulsan la innovación en la sociedad. Desde avances en la medicina hasta la productividad en los puestos de trabajo, la recopilación y el análisis de datos fomentan el progreso y el desarrollo para contribuir a una mejora constante y adaptación al cambio.
Aquí un ejercicio para empezar a cambiar tu perspectiva:
Si te dan miedo los datos, la incomodidad va a estar ahí y no existe una varita mágica para borrarla, sin embargo, si empiezas a verlos como una oportunidad y no como enemigos que hablan mal de ti, tendrás oportunidad de encontrar soluciones y no estancarte.
Al ver los datos podrás tener una visión objetiva de cualquier situación. Observa qué hay detrás de un dato para ti. ¿Cuánto de lo que piensas es realmente el dato y cuántas son tus ideas detrás de él? Por ejemplo, puedo ver el número actual en mi cuenta bancaria y empezar a tener pensamientos y creencias limitantes como: “A estas alturas ya debería de tener más ahorros” “Esto no es suficiente para cumplir mi sueño” “Si hay una emergencia, ¿tengo suficiente dinero?” “No me alcanza para nada”. O puedo ver ese mismo número y pensar: “Quiero utilizar mi dinero para lograr tal y cual. ¿Esto es suficiente? En caso de que no sea así ¿cómo puedo ahorrar o tener un mayor ingreso? ¿Cuáles son los pasos a seguir para lograr esto?
¿Notas la diferencia?
Conclusión:
Así que la próxima vez que sientas que te dan miedo los datos o que te incomoden, haz este ejercicio y ve cómo te resulta. Tal vez la primera vez no sea fácil, y tal vez haya situaciones en las que la incomodidad sea mayor que otras, sin embargo, con la práctica lograrás encontrar más soluciones y cambiar tu perspectiva ante los datos ¡comienza a ver los datos como tus aliados!